“Eliza estaba haciendo equilibrio en el borde de la acera cuando se tropezó y cayó sobre la mano izquierda”, recuerda Jenifer, su madre. “La botella de vidrio que sostenía se le hizo añicos en la mano. Alguien nos vio desde la oficina de un edificio cercano, vino a ayudarnos y llamamos al 911. Inmediatamente nos dirigimos al Nicklaus Children's Hospital, anteriormente Miami Children's Hospital”.
Eliza llegó al hospital e inmediatamente fue referida a una sala en la que el personal médico le vendó la mano y discutió las opciones de tratamiento. La doctora Deirdre Marshall, cirujana plástica y reconstructiva en el Nicklaus Children's Hospital, anteriormente Miami Children's Hospital, fue la persona seleccionada para llevar a cabo la cirugía.
Al enterarse de que Eliza necesitaba una cirugía, su padre Robert, dueño de una peluquería en Miami, llamó a un cliente para que lo ayudara a elegir un cirujano. Jefry Biehler, médico de emergencias del Nicklaus Children's Hospital, anteriormente Miami Children's Hospital, le garantizó a Robert que la doctora Marshall era la mejor opción.
"El Dr. El doctor Biehler no sólo puso énfasis en su recomendación de la doctora Marshall, sino que se tomó el tiempo para visitar a Eliza mientras se encontraba en el hospital”, dijo Robert. “Ese es sólo un ejemplo
del tipo de atención personalizada y tranquilidad que recibimos de parte del personal médico del Nicklaus Children's Hospital, anteriormente Miami Children's Hospital”.
Manos que curan
Al día siguiente, la doctora Marshall realizó la cirugía para restaurar los nervios y tendones de la mano, codo y muñeca de Eliza, que se habían visto afectados a causa del accidente.
“Soy zurda, por eso, además de estar muy asustada, temía perder la sensibilidad en esa mano”, dice Eliza. "El Dr. La doctora Marshall y el resto del personal me tranquilizaron mucho, realizaron controles continuos y me explicaron lo que pasaba en todo momento”.
Después de la cirugía, Eliza debió recibir fisioterapia frecuente tres veces por semana durante seis meses en el Nicklaus Children's Hospital, anteriormente Miami Children's Hospital. Durante su estadía en el hospital, que según la madre de Eliza fue el factor principal para su exitosa recuperación, Eliza realizó ejercicios para aumentar la fuerza de la mano, como apretar una pelota de plastilina o juntar canicas con unas pinzas. Hoy Eliza recuperó las funciones de la mano por completo.
Nace una estrella
Eliza baila desde los tres años, y descubrió nuevas habilidades en su adolescencia: canta, escribe canciones y toca la guitarra. La niña que antes fuera reina del Junior Orange Bowl, ahora es alumna del primer ciclo de la escuela secundaria en la escuela Palmetto Senior High y espera triunfar como cantante y compositora. Eliza lanzó recientemente su primer CD, un compilado de mensajes inspiradores basados en el libro de salmos de la Biblia. También tiene pensado seguir tocando la guitarra, y utilizar la mano izquierda totalmente recuperada para hacer su música.
“Sin la doctora Marshall y el personal del Nicklaus Children's Hospital, anteriormente Miami Children's Hospital, Eliza no podría hacer las cosas que ama ni las sencillas actividades diarias que todos damos por sentadas”, destacó Robert. “El personal del hospital es tan humanitario y bondadoso, que logró que mi hija hiciera un gran esfuerzo por recuperarse. Estamos muy agradecidos”.