Dr. Chad Perlyn (anfitrión): Bienvenidos al podcast For Peds Sake, un podcast de Nicklaus Children's Hospital, donde nos dedicamos a hablar de atención médica específica para niños. Soy su anfitrión, el Dr. Chad Perlyn, cirujano plástico pediátrico aquí en Nicklaus Children's, y estoy muy emocionado de darles la bienvenida al episodio de hoy. Este episodio va a ser muy importante.
Hoy nos acompaña la Dra. Sara Rivero-Conil, psicóloga pediátrica aquí en Nicklaus Children's, para hablarnos sobre algo tan crítico como es la salud mental pediátrica. También me gusta recibir a Sara en el podcast porque tiene dos hijos, un adolescente y un preadolescente, casi de la misma edad que mis hijos. Así que, estamos ansiosos de tener esta conversación y compartir experiencias como médicos, como padres, y hacerles llegar información muy útil a nuestras familias. Gracias por estar aquí con nosotros.
Dra. Sara Rivero-Conil: Gracias por recibirme.
Anfitrión: Vayamos directo a lo nuestro. Cuéntenos un poco sobre su historia y por qué le interesó convertirse en psicóloga pediátrica.
Dra. Sara Rivero-Conil: Bueno, me encanta el comportamiento humano. Me encantan las emociones. Soy una persona de energía alta, como me han dicho. Y me encanta trabajar con niños. Y no hay nada mejor y más gratificante que trabajar con niños y darles las herramientas para lidiar con la vida. Quiero decir, la vida es difícil. La sociedad es difícil. Como adultos, a veces, nos cuesta. Entonces ¿por qué no trabajar con los niños y darles las herramientas que necesitan para tener otro tipo de vida?
Anfitrión: Es maravilloso que se haya dedicado a este campo. Es un campo que ha cobrado mucha relevancia en los medios de comunicación después de la pandemia, o del cual escuchamos en las escuelas y los desafíos que se presentan hoy. Cuéntenos algunos de los problemas comunes que ve en los niños hoy en día y algunos de los problemas en los diagnósticos que trata más comúnmente.
Dra. Sara Rivero-Conil: Excelente pregunta. Mucho de lo que vemos no se difiere de lo que sucede a lo largo y ancho del país. Estamos viendo mucha ansiedad y depresión. En todas las edades, podemos ver a niños con ansiedad a partir de los cuatro años, tres años, simplemente lo demuestran de manera diferente. Entonces, algo que es bastante interesante es que los padres llaman al consultorio todo el tiempo y dicen “a mi hijo le está sucediendo algo, algo está pasando”, ya sea emocional o en su conducta. Y, cuando entramos en escena y lo evaluamos, podemos compartir lo que es, ansiedad, depresión y está afectando su vida. Eso es lo más importante. De nuevo, tenemos que asegurarnos de que nuestros hijos tengan las herramientas para conquistar el mundo y divertirse mientras tanto, ¿verdad? Así que en el consultorio lo que vemos es mucha ansiedad, mucha depresión.
Anfitrión: Tiene mucho sentido. Mencionó algo y sé que esta es una pregunta que se les vendrá a la mente a todos los padres que están escuchando. ¿Cuáles son los signos a los que debemos prestar atención como padres de que algo puede no andar bien en nuestro hijo, de que puede estar teniendo ansiedad o depresión, como dijo? Y para los que tenemos hijos adolescentes, ¿cómo sabemos la diferencia entre una afección médica o un trastorno psicológico real y esto que todos decimos que simplemente están en la adolescencia? Mi hijo de 15 años nunca quiere levantarse de la cama por la mañana. ¿Es un problema? ¿Debo preocuparme? ¿O simplemente es adolescente? Háblenos de eso.
Dra. Sara Rivero-Conil: Excelente pregunta. A esas las llamamos las señales de alerta. Me encanta hablarles de esto a los padres y explicarles a qué deben estar atentos. Les digo: “Ustedes son los expertos en su hijo, así que saben cuándo las cosas no están bien”. Entonces, hay que estar atentos al sueño. ¿Está durmiendo en exceso, tienen dificultad para conciliar el sueño? ¿Tiene dificultad para permanecer dormido? Diferentes aspectos del sueño. ¿Qué sucede con el apetito? ¿Come en exceso? ¿Ve que hay algún cambio en el apetito? Impacto en el funcionamiento social, ¿está poco sociable? ¿No está haciendo las cosas que solía disfrutar? Otra cuestión a tener en cuenta es la disminución en el desempeño académico. Por ejemplo, un estudiante de alto desempeño de repente no entrega las tareas. Saca calificaciones bajas. Si ve esos cambios,
no espere demasiado para preguntarle a su hijo qué está sucediendo. Espero que hablemos mucho sobre la comunicación, porque creo que eso es lo que es difícil en la adolescencia. Y como padres, y yo como madre, tengo que ponerme en el papel de psicóloga a veces y no es fácil. Hablo con los padres y les digo: “Sé que no es fácil, pero sigan haciéndolo. Su hijo importa. Ustedes importan. Pregúntenle qué está sucediendo. Escúchenlo”. “Escucha más de lo que hablas” funciona muy bien con los adolescentes.
Anfitrión: Creo que es un gran consejo. Y permítame repetirlo, así yo también lo memorizo: Escucha más de lo que hablas. ¿Es correcto?
Dra. Sara Rivero-Conil: Esa es la clave. Se los digo a muchos padres y lo hago con mi hija. Me va a matar cuando escuche esto, pero sabe que es algo estratégico. Le pregunto: “¿Quieres que te escuche o quieres que te aconseje?” Y según su respuesta, hago lo que me pida. Esa es la parte difícil. Porque a veces quieres decirle a tu hijo, haz esto, quieres protegerlo. Cuando están aprendiendo a caminar, les dices: “Vuelve a levantarte y volvamos a intentarlo”. Quieres protegerlos en todo momento. Y, cuando son adolescentes, solo podemos hacer hasta cierto punto. No siempre vamos a estar allí para protegerlos. Entonces, lo que hay que hacer es enseñarles a resolver los problemas ellos mismos, y eso es difícil. Es muy difícil porque los escuchas con el corazón, son tus hijos.
Anfitrión: Es un consejo muy importante y una excelente transición a mi siguiente pregunta. ¿Qué sucede con los medios digitales? Ya sea Facebook, Instagram o TikTok, o cualquier plataforma actual en la que nuestros hijos estén hoy, teléfonos, tabletas y todo lo relacionado con eso. Muchos estudios han demostrado los efectos de esto en la salud mental de los niños, en particular en las muchachas jóvenes y en los adolescentes. Cuéntenos lo que piensa como psicóloga pediátrica sobre cómo las redes sociales, los medios digitales y las tecnologías digitales están afectando el bienestar de nuestros niños en la actualidad. Y qué debemos hacer como padres al respecto.
Dra. Sara Rivero-Conil: La tecnología es algo hermoso, pero es una herramienta muy peligrosa en las manos equivocadas. Una de las cosas que les digo a los padres es que tienen que darles mentoría consciente a sus hijos, porque si no lo hacen ellos, lo hará otra persona. Y creo que lo que queremos es enseñarles a nuestros hijos nuestros valores y nuestra moral tanto como podamos. Entonces, sí, definitivamente vemos que usar la tecnología y las redes sociales los ayuda a conectarse con amigos y a explorar sus intereses.
Pero, por otro lado, también vemos que algunos de estos niños miden su autoestima en cuántos me gusta y cuántos comentarios reciben. Constantemente miran otras cosas e intentan obtener la imagen correcta. Se aíslan socialmente. Pasan mucho tiempo en sus teléfonos. Entonces, si están en su teléfono, no tienen las interacciones en persona que tanto anhelan. Y luego, la pandemia realmente nos modificó, esa era su única forma de socializar. Estamos revirtiendo un poco de eso ahora.
Y a los padres, les digo todo el tiempo que dejen sus propios teléfonos. Debemos modelar estos comportamientos para nuestros hijos. Tenemos que enseñarles que el mundo es atemorizante y que en este momento lo tienen literalmente en sus manos. Así que si no les enseñamos, igualmente van a aprender, van a tener curiosidad. Sus mentes son curiosas. Recurrirán a Google para todo, así que estén listos para eso. Y cuando les den mentoría consciente, díganles lo bueno y lo malo y cómo navegar estas cuestiones. Como dije antes, tenemos que ayudarlos a aprender estas habilidades de resolución de problemas porque en un momento tienen que hacerlo solos. Y los adolescentes son difíciles porque no quieren que les digan qué hacer. No he conocido a un adolescente al que le guste que le digan qué hacer. Por lo tanto, es muy importante ser prudentes en esto.
Anfitrión: Dijo una frase que me acaba de llamar la atención, creo que es realmente magnífica: mentoría consciente. Qué concepto importante. Y como dijo, estaba pensando, ayer mi hijo de 11 años estaba en un estacionamiento, un estacionamiento concurrido, y estaba con el teléfono, mirando los medios digitales, lo que fuera, y lo regañé. Le dije: “escucha, estás en un estacionamiento concurrido. Tienes que prestar atención, deja el teléfono”. ¿Y qué me encontré yo mismo haciendo 15 segundos después? Respondiendo un mensaje de texto que me llegó mientras caminaba por el mismo estacionamiento. Así que voy a tomar ese consejo para mí mismo. Espero que todos nuestros oyentes también puedan tomar esta idea de mentoría consciente y de reflejar en nuestros comportamientos lo que les decimos a nuestros hijos. Eso está muy bien dicho.
Sara, sé que cada afección es diferente en cada niño. ¿Pero hay temas comunes? Habló un poco de esto, de que los padres deberían estar atentos para saber cuándo hablar con un médico en este ámbito. ¿Y quién debería ser ese médico? ¿El pediatra? ¿Alguien de la escuela? ¿Tienen que comunicarse directamente con un psicólogo o psiquiatra pediátrico? Háblenos de este tipo de proceso de cuando uno ve una señal de alerta y recuérdenos cuáles son porque son muy importantes y luego díganos qué hacer a continuación, para que nuestras familias sepan cómo buscar ayuda.
Dra. Sara Rivero-Conil: Me encanta esta pregunta, porque lo que nos dicen las investigaciones es que los niños o las personas reciben servicios entre 8 y 10 años después de la primera vez que aparece un síntoma. Eso es mucho tiempo. Me encanta trabajar con niños, así que esperamos inculcar algunas de estas habilidades desde que son pequeños. Bueno, los padres son los expertos. Ustedes son quienes mejor conocen a sus hijos. Si ven alguno de los cambios de los que hablamos antes, cambios en el sueño, el apetito, el desempeño académico, que no quieren hacer cosas que solían disfrutar, que se están aislando, comiencen a tener estas conversaciones.
Los pediatras a menudo son un excelente punto de contacto para las familias. Han visto al niño crecer. Por lo general, el niño confía en ellos. Pueden hacer que hablen con su pediatra sobre lo que está sucediendo, esa es una gran forma de empezar a obtener algo de apoyo y evaluar si necesitan más ayuda y quién es la persona adecuada. Pero cuando sienten que su hijo tiene ciertos comportamientos que son persistentes, no algo de un solo día. Los fines de semana, el hijo adolescente duerme. Probablemente duerme porque está agotado y vive muchas cosas durante la semana. Pero si ven algunas diferencias, busquen ayuda. No esperen. No esperen. Preferiría, cualquier día, que los pacientes vengan a mi consultorio y decirles: “Está bien. Es la adolescencia. Estas son algunas herramientas de comunicación”, porque creo que el bienestar mental es muy importante. No hace falta tener un diagnóstico para aprender algunas de estas habilidades, pero las estamos aprendiendo demasiado tarde. Lo estamos haciendo cuando no van a clases. Estamos recibiendo ayuda cuando el sueño ha afectado la memoria y el desempeño académico y social. Entonces, simplemente presten atención y vean qué clase de escucha hacen. Escuchar es muy importante.
Voy a darles un consejo que les digo a muchos padres y lo pongo mucho en práctica. Mis hijos van a escuchar esto y sabrán exactamente lo que hago todo el tiempo. Cuando estoy conduciendo y comienzan a hablarme, se ponen platicadores, lo que hago es tomar el camino largo a casa. Conduzco más lento, me quedo callada y simplemente escucho. Y estoy siendo consciente en ese momento. Estoy disfrutando de ser mamá en ese momento. Y algunas de las cosas que dicen me resultan atemorizantes, pero me encanta que me las cuenten. Me encanta que me pregunten. Porque si no los escucho, irán y le preguntarán a otra persona. Y puede ser que le pregunten a un niño en la escuela que tampoco tiene las herramientas adecuadas. Creo que la comunicación es importante, lo repito porque es muy difícil como adultos, la sociedad está muy difícil. Suceden muchas cosas y a los adultos les cuesta mucho todo eso. Nuestros adolescentes no están haciendo nada diferente. Y con las redes sociales, volviendo a las redes sociales, ven todo lo que está sucediendo. A veces, mis hijos han llegado a casa y me han contado lo que estaba sucediendo, porque yo estoy trabajando y no estoy mirando las noticias entonces me lo cuentan ellos.
Anfitrión: ¿Tiene ideas respecto a cómo entablar una conversación con nuestros hijos, ya sea en el viaje en auto a casa, como dice, lo cual creo que es una gran oportunidad o en otro lugar? ¿Algún consejo para los padres sobre cómo generar esa interacción? He escuchado cosas como: “No le preguntes a tu hijo adolescente: '¿Cómo fue tu día hoy?'” esa no será una buena forma de iniciar la conversación. Responderá con una sola palabra.
Dra. Sara Rivero-Conil: Dirá “bien” o “mal”.
Anfitrión: Bien o mal, claro. He escuchado que algunas personas dicen “cuéntame algo que sucedió hoy que te resultó interesante”, o algo así, para empezar la conversación. Porque, como dijo, ¿quién sabe qué puede salir de allí. Denos algunos consejos sobre esto.
Dra. Sara Rivero-Conil: Esa es una excelente pregunta. Algunas cosas que pueden preguntar, según lo que les preocupe, son: ¿Con quién almorzaste hoy? ¿Qué comiste hoy en el almuerzo? ¿Qué tal la clase de matemáticas? ¿Qué estaba sucediendo allí? ¿Aprendiste algo? ¿Te gustaría volver y cambiar algo de tu día?” Y enseñarles gratitud mientras mantienen estas conversaciones, ¿por qué no usamos estas conversaciones para dos cosas en simultáneo? “¿De qué estás agradecido?” “¿Qué te gustó?”
Se sorprenderán a cuántos adultos les resulta difícil tener una actitud de gratitud, reconocer las pequeñas cosas y ser conscientes de su día. Si comenzamos estas conversaciones desde temprano, estoy hablando de los padres jóvenes ahora, su hijo tiene dos, tres años, háblenle, desarrollarán vocabulario, le enseñarán sobre las emociones. Y cuando les cuenten que algo salió mal, escúchenlos y díganles: “Lo siento. Está bien no estar bien”, porque nuevamente, como padres, queremos protegerlos. “Ah, está bien. Te sacarás una A la próxima vez. Está bien”, o diremos, “Deberías haber estudiado más”.
Y quiero que los padres sean conscientes de lo que está sucediendo. Cuando hablen, hay algunas cosas que tienen que preguntarse antes de empezar a hablar. La primera que dije antes es: ¿quiere que lo escuche o quiere que lo aconseje? Y la segunda es que cuando hablen con sus hijos, deben preguntarse: “¿Estoy tratando de regañarlos o quiero enseñarles?” ¿Quiero enseñarles: “No tomes el teléfono mientras cruzas la calle” o quiero regañarlos? “No, no deberías hacer eso”, pero explíquenle por qué no debería hacerlo para enseñarle. Y el tono que emplean para decirlo, si se percibe como disciplinario, entonces no los van a escuchar tanto. Intenten equilibrar eso. Existe la disciplina. La necesitamos. Necesitamos regañar a nuestros hijos. A veces están haciendo cosas que no deberían hacer, entonces pueden decirles: “Oye, dije esto porque estaba preocupado. Me preocupaba que pudieras lastimarte. Me preocupa, sabes, que pueda suceder algo que te afecte, etcétera”. Pero pregúntense, ¿están tratando de enseñar? ¿Están tratando de regañar en esos momentos y de ser firmes?
Anfitrión: Mentoría consciente. Creo que esa es una gran conclusión para la charla de hoy. Quiero volver por un minuto a las redes sociales, porque se me vino algo a la cabeza. Y sé que hay muchos pensamientos y teorías diferentes sobre esto y diferentes recomendaciones de diferentes organismos de acreditación, pero quizás pueda compartir sus pensamientos tanto como psicóloga infantil como como madre en la era de las redes sociales. ¿Cuándo deberían los niños comenzar a tener acceso a ellas? ¿Hay alguna idea que pueda compartir con los padres que nos escuchan? Porque sé que muchas personas se están haciendo esta pregunta.
Dra. Sara Rivero-Conil: Es complejo porque no podemos resguardar a nuestros hijos por demasiado tiempo, porque entonces quedarán socialmente aislados. Los niños se conectan y envían invitaciones por las redes sociales. Y si su hijo no está en las redes sociales, no lo invitarán. Así es como aprendí mucho. Dejando que mis hijos adolescentes usen las redes sociales. Pero hay que tener en cuenta qué redes sociales usan. Aprendan formas de ser padres conectando con sus hijos y siendo sus amigos sin realmente entrometerse en sus vidas, sean su amigo, háblenles, como: “A ver qué estás haciendo”.
Tener esas conversaciones desde el principio es muy importante cuando uno les da esta poderosa herramienta. Una vez que se la diste, es muy difícil sacárselas Tengan esta conversación desde el principio. “Escucha. Estas son las ventajas y las desventajas de esto. Eres lo suficientemente responsable”. Y sé que me preguntaste por una edad, pero creo que realmente tienen que medir la responsabilidad y madurez de su hijo. Por ejemplo, si no es lo suficientemente maduro o responsable, pero aun así creen que es lo suficientemente grande. Tiene 13 años y todos sus amigos están en TikTok o haciendo algo, denle solo una determinada cantidad de tiempo y enséñenle Enséñenle cómo usarlo. Enséñenle qué decir. Me sorprende mucho cada vez que viene un niño y me dice: “Mira el mensaje que me mandó un amigo, está muy triste” y veo cómo responde. No saben cómo comunicar socialmente sus emociones. Digo, las emociones son complicadas, ¿verdad? Hay que nombrarlas, descifrarlas y luego hablar de ellas. Entonces, hay que enseñarles cómo hacerlo. Es lo más importante, pero son ustedes quienes mejor conocen a sus hijos.
Anfitrión: Excelente consejo. Y creo que es un gran consejo saber la importancia de enseñarles a nuestros hijos a comunicarse en situaciones difíciles, lo que en última instancia les ayudará en su bienestar mental en comparación con usar un emoji y a menudo ni siquiera comprender realmente el significado que tiene. Excelente, excelente consejo.
Dos últimas preguntas, muy importantes. Mencionó el bienestar mental. Y sé que ha sido una defensora de esto por mucho tiempo. Y una gran partidaria profesional de esta noción. Y nuestros oyentes, todos sabemos, una vez al año vamos a que le hagan el control de estatura a nuestro hijo. O si ya somos adultos, nos hacemos un examen preventivo. Una mamografía o una colonoscopia para controlar el colon. Pero ¿quién controla nuestra mente, verdad? ¿Quién controla nuestra salud mental, nuestro bienestar mental? un chequeo de bienestar de nuestro cuerpo y un chequeo de bienestar de nuestra mente. Tal vez podría hablarnos un minuto sobre su trabajo como defensora de este tema, porque todos nosotros en Nicklaus Children's creemos que es muy importante.
Dra. Sara Rivero-Conil: Me encanta el programa. En este momento, estamos asociados con los pediatras de aquí de Nicklaus, donde hay un psicólogo que trabaja con el equipo y simplemente realiza un seguimiento de los niños durante los períodos de transición. También ve a niños 8 o 10 años después, ¿verdad? Pero hay que hacer un control cuando ingresan a la escuela secundaria. ¿Tienen las herramientas adecuadas cuando ingresan a la escuela media? El bienestar es muy importante. Y consultar a alguien una vez al año sería ideal. Hemos presentado cierto apoyo a nivel estatal y federal al hablar sobre por qué no tenemos algo más allá de los pediatras, que están haciendo un gran trabajo al tratar de evaluar y mantenernos al día con todo eso. Pero a veces se necesita más que eso. También se trata de darles las herramientas que podemos darles desde la psicología.
Y uno de los hermosos programas que conducen a ese bienestar mental del que estamos hablando aquí se llama Wise Girls. Y se trata de darles a las niñas herramientas para defenderse, para saber cómo decir que no. Muchachas adolescentes que aprenden a decir que no. Qué hermoso. Las adolescentes aprenden a defenderse y a defender a sus amigos y a tener declaraciones positivas sobre sí mismas. Salir con la frente en alto y sentirse bien consigo mismas. Esas son las habilidades y digo muchachas, porque comenzamos con esa población. Les damos las habilidades para enfrentar a la sociedad y el resto de su vida. ¿No es algo muy hermoso? Porque nunca se sabe cuándo aparecerá una enfermedad mental. ¿Por qué no tener las herramientas de antemano?
Anfitrión: Sí. Realmente ha sido una defensora increíble de los niños de nuestra comunidad en nombre de todos nosotros. Gracias por eso.
Última pregunta. Hemos hablado mucho en general sobre la salud mental en adolescentes y niños pequeños. Para los padres que están escuchando hoy o tal vez adolescentes que están escuchando, aquellos que tienen hijos o que ellos mismos tienen problemas importantes, problemas de salud mental o del comportamiento, ya sea ansiedad o depresión u otras cuestiones, que pueden sentirse desesperanzados, que pueden sentirse perdidos, tal vez pueda cerrar con algunas ideas para esas familias o pacientes que están escuchando y decirles qué ayuda hay disponible y qué les depara el futuro.
Dra. Sara Rivero-Conil: Lo primero es que no están solos. No están solos. Estamos aquí para ayudarlos. Busquen a esa persona en la que confían y pidan ayuda. Estos podcasts son muy importantes, porque a veces las personas quieren ayudar y no saben cómo hacerlo y por eso hoy dimos muchos consejos sobre cómo escuchar y comunicarse. Pero busquen la ayuda, hablen con alguien de confianza. Los sistemas escolares tienen maravillosos consejeros que pueden guiarlos en el camino para obtener apoyo. Pero lo más importante es que no están solos y está bien no estar bien. Pero, sí, busquemos ayuda.
Anfitrión: Es maravilloso. Gracias. Sara, a usted, al resto del equipo de psicología de Nicklaus Children's, a sus colegas médicos, al equipo de psiquiatría, gracias. Realmente son héroes para los niños de nuestra comunidad al intentar mejorar sus vidas, haciendo una diferencia para ellos y sus padres en un área tan desafiante, especialmente hoy en día. Así que en nombre de todos nosotros, gracias. Ha sido un verdadero placer tenerla en el podcast hoy.
Dra. Sara Rivero-Conil: Gracias.
Anfitrión: A usted. Así concluye este episodio del podcast For Peds Sake. Esperamos que hayan tomado algunos consejos útiles de la Dra. Rivero-Conil. Estamos todos aquí para responder cualquier pregunta adicional mediante nuestro programa de psicología y psiquiatría. Asegúrense de estar atentos a nuestro próximo episodio. Estamos emocionados de continuar profundizando en el mundo de la atención médica pediátrica. Gracias.