¿Qué significa un estilo de vida saludable para sus hijos? Un estilo de vida saludable puede abarcar una variedad de cosas como nutrición, ejercicio, atención plena, espiritualidad, diversidad cultural y más. Los investigadores a menudo leen estudios que muestran el riesgo de enfermedad o muerte prematura y qué es lo que aumenta ese riesgo. Es importante inculcar hábitos de estilo de vida saludables en nuestros hijos a una edad temprana. Las siguientes son cinco maneras de ayudar a sus hijos a mantener un estilo de vida saludable.
N.º 1 Implementar una dieta saludable
No es ninguna sorpresa que lo que nuestros hijos ponen en sus cuerpos tiene un efecto profundo en la forma en que se sienten, su estado de ánimo general, sus niveles de energía y su crecimiento y desarrollo. Como padres, somos responsables de qué les damos de comer a nuestros hijos, y nuestros hijos son responsables de comer lo que les ofrecemos. Si la dieta de su hijo tiene un alto contenido de azúcar y grasa, prepárese para estados de ánimo perezosos, un desempeño subóptimo en la escuela y la posibilidad de un aumento de peso excesivo. Todo esto podría tener efectos negativos a largo plazo. Es importante alentar a los niños a comer cinco porciones de frutas y verduras cada día. Las frutas y verduras tienen pocas calorías, pero contienen muchas vitaminas, minerales y fibra. Este tipo de alimento es excelente para el cerebro y es bueno para la salud intestinal.
N.º 2 Sea consciente del tamaño de las porciones
El tamaño de las porciones ha crecido en las últimas décadas, y muchos expertos afirman que esto fue una de las causas de nuestra epidemia de obesidad. Los niños no necesitan comer tanto como los adultos, así que tenga cuidado al dividir las porciones de alimentos para el plato de su hijo. El tamaño de las porciones varía según la edad y el nivel de actividad. Un niño de 3 años necesitará tamaños de porción diferentes a un niño de 8 años, y un niño de 8 años, una porción diferente a un niño de 16 años. El plan Mi plato en choosemyplate.gov es un excelente punto de partida, ya que da un entendimiento básico de los tamaños de porción adecuados para la edad de su hijo.
N.º 3 La hidratación es clave
¡Agua, agua, agua! Fomentar el consumo de agua es de suma importancia. A veces, los niños piensan que tienen hambre cuando en realidad tienen sed. Esto se debe a que el centro de hambre y el centro de sed están justo uno al lado del otro en el cerebro, por lo que envían señales muy similares. Si sabe que su hijo ha comido mucho durante la comida o que comió un refrigerio, pero está pidiendo más alimentos, aliéntelo a beber un poco de agua primero. Además, aliente el consumo de agua entre las comidas. Mantener la hidratación puede prevenir la fatiga, los dolores de cabeza y ayuda en la digestión y absorción de los alimentos. Es importante limitar el consumo de jugos, refrescos y cualquier otra bebida azucarada, y reemplazar este antojo por una fruta. Recuerde que las bebidas azucaradas no tienen beneficios para la salud.
N.º 4 Ejercicio
El objetivo debe ser de sesenta minutos de juego por día para sus hijos. Se recomienda cualquier cantidad de tiempo de juego que implique ejercicio. Las investigaciones demuestran que incluso entre 10 y 20 minutos por día pueden ser beneficiosos para cualquier persona. Hacer que el corazón del niño bombee y que la sangre fluya ayuda a mejorar la resistencia y la salud digestiva. Me gusta jugar al pilla-pilla con mi hijo y, durante la pandemia, preparé divertidas pistas de obstáculos en nuestro hogar. También vamos a caminar en familia. ¡Sea creativo y póngase en movimiento!
N.º 5 Vitaminas
Como se mencionó anteriormente, una dieta saludable que incluya frutas, verduras, granos integrales, proteínas magras y una cantidad moderada de grasa es clave para un estilo de vida saludable. Es posible que los niños que consumen una dieta balanceada no necesiten un suplemento multivitamínico diario. A algunos niños no les gustan la carne o los lácteos, o no consumen suficientes frutas y verduras. En este caso, puede ser una buena idea incorporar un multivitamínico. Como siempre, analice cualquier suplemento con el pediatra de su hijo.