Cuando Apollonia estaba embarazada de cuatro meses, recibió una llamada que cambiaría su vida para siempre.
A su bebé por nacer se le diagnosticó citomegalovirus congénito (CMV), una infección con una amplia gama de síntomas, desde fiebre y fatiga hasta síntomas más graves que pueden afectar a los ojos, el cerebro u otros órganos internos.
Después de visitar a varios médicos en el transcurso de tres años debido a que su familia se mudaba a menudo, Apollonia estaba encantada y aliviada de haber encontrado un médico con el que Athena pudiera abrirse y confiar. Debido a las experiencias médicas anteriores de Athena, desarrolló lo que mamá describió como el ‘síndrome de la bata blanca’, que le dificultaba acudir a las citas médicas.
Afortunadamente, la Dra. Luxme Hariharan, oftalmóloga pediátrica del Nicklaus Children’s Hospital, pudo ponerse en contacto con Athena y determinar que lo único que necesitaba era algo tan sencillo como unas gafas para corregir su anomalía.
Antes de tener las gafas, a Athena le costaba ver y a menudo tenía que entrecerrar los ojos o acercar los libros y las tabletas a la cara, por ejemplo, y eso afectaba mucho a su calidad de vida en general. Después de recibir sus anteojos, su personalidad y confianza crecieron. Los padres de Athena han visto un cambio en su comportamiento y su capacidad para relacionarse y hacer amigos más fácilmente gracias a la ayuda del Nicklaus Children’s Hospital.
¡Apoye a pacientes como Athena con su donación hoy y ayude a cambiar más vidas!