Cuando Nicole, de 6 años, se quejó de que le dolía la cabeza, sus padres Roberto y Tamara la llevaron a cuidados urgentes para ser evaluada. Se le recetó Tylenol, pero el dolor persistió. En cuestión de días, decidieron llevar a su hija al Nicklaus Children’s Hospital, donde un equipo multidisciplinario de especialistas notó que los ojos de Nicole estaban hinchados y ordenaron más pruebas. A Nicole se le diagnosticó un tumor cerebral maligno e inmediatamente comenzó el tratamiento en el Instituto del Cerebro de Nicklaus Children’s, incluida la cirugía para extirpar la masa. El tratamiento de Nicole también consistió en radiación, en colaboración con Baptist Health South Florida y Miami Cancer Institute. Hoy ya no tiene cáncer y, como les dice a sus padres, “más vale que sean lágrimas de felicidad porque sigo viva”.